Otro Año que Se Acaba
El año se termina y este es mi último blog post del 2023. Parece mentira que ya haya pasado un año más. Es increíble lo que puede pasar en tan sólo 365 días; ya tenemos otros miles de momentos más añadidos a nuestro libro de la vida.
En esta época del año, es en la que muchos hacemos un balance de lo sucedido, de los éxitos y fracasos, de las subidas y bajadas, y sobre todo, de lo que queremos dejar de lado y lo que queremos incorporar en nuestras vidas. En resumen, de todo los aprendizajes que tuvimos.
Muchas experiencias y momentos nuevos han marcado un antes y un después en nuestras vidas, y que quizás ahora mismo no notemos, pero cuando miremos hacia atrás en el futuro nos daremos cuenta de que algo tuvo que haber pasado para que se produjeran cambios tan notables.
Todos sabemos que cada día es una nueva oportunidad. Y que no es necesario esperar hasta el 1 de enero para plantearse nuevas metas y optar por un nuevo estilo de vida. Pero por alguna razón, se dice que cada fin de año es el mejor momento para cerrar ciclos y fijarse nuevas metas.
Hoy sólo quiero invitarlos a reflexionar sobre tener que esperar un año para establecer cambios, metas u objetivos y a compartirles lo que he aprendido en este 2023 y cómo aplicarlo el año que viene.
Y quiero empezar con la afirmacion de que sí, a veces es bueno decirnos que mañana será mejor para mantenernos positivos, motivados y optimistas, pero también es muy importante ser y estar flexibles y centrarse en el hoy, porque la otra verdad es que no sabemos el mañana.
La esperanza de que el año nuevo será un comienzo se repite cada Navidad. El nuevo año es a menudo visto como nuevas oportunidades, sin embargo, no hace falta esperar al 1 de enero para marcarse nuevos objetivos y optar por un nuevo estilo de vida. Si realmente quieres darle un cambio a tu vida: ¡EMPIEZA HOY!
Eso de esperar al 1 de enero, el lunes o después de las vacaciones es solo un prestesto para no hacerlo ya. Si quieres conseguirlo y tienes ahora la fuerza para hacerlo, ¿por qué no comenzar cuanto antes? ¡Seguramente ese ímpetu del comienzo te ayude!
Aunque nos encontremos en las últimas semanas del año no tenemos que esperar al día 1 para los nuevos propósitos, metas u objetivos.
Ahora es el momento de hacer lo que más quieres. No esperes al lunes, ni esperes a mañana.
"Hace falta toda una vida para aprender a vivir". Así que mientras vivas, sigue aprendiendo a vivir.
A todos y cada uno de nosotros el destino nos otorga un tiempo, pero no sabemos cuánto. Lo único seguro es que ese espacio de tiempo que es nuestra vida no se puede parar, rebobinar ni recuperar, y el contador sigue avanzando sigilosamente, Por eso compartimos contigo algunas de las razones por las que el "Hoy" es importante.
Estas son nuestras razones:
– El valor del TIEMPO.
Si ahora mismo no estás contento con algo o alguna situación, si tienes claro que quieres cambiarlo… ¿por qué esperar? Cuanto antes comencemos antes llegaremos a nuestra meta y, por tanto, nos desharemos de eso que nos tiene descontentos. La vida es demasiado corta para pasarla esperando. Cuando dejamos para mañana algo que podemos hacer ya, estamos malgastando TIEMPO y siempre nos quejamos de que no lo tenemos. Sabemos que el tiempo es finito y aprovecharlo en aquello que nos importa es algo necesario si realmente lo valoramos. No nos arrepintamos por lo que no hicimos, disfrutemos lo que logramos.
– Antes termina lo que antes empiezas.
Nuestra cultura nos hace ver el 1 de enero de cada año como un nuevo comienzo pero si decidimos comenzar antes con nuestros propósitos, cuando somos conscientes de que queremos lograrlos, llevaremos ventaja. Sea cual sea nuestra meta profesional o personal, si comenzamos ya iremos aventajados con respecto a si comenzamos el primer día del año. ¡Cada día cuenta!
– Una decisión lo cambia todo.
El 1 de enero no divide nuestras vidas en un antes y un después, es únicamente un hábito o tradición cultural. Lo que hace que nuestras vidas cambien son las decisiones porque “un deseo no cambia nada, pero una decisión lo cambia todo”. Así que cuanto antes tomemos acción, antes veremos resultados. No habrá mayores probabilidades de lograrlo si esperamos, ni conseguiremos un premio a la paciencia, simplemente estaremos retrasando nuestra decisión.
– ¿21 días crea un hábito?
Si es verdad eso de que 21 días haciendo una cosa crea un hábito, si comenzamos ya cuando empiece el 2024 ya tendremos nuevos hábitos y, por tanto, comenzaremos el viendo los primeros resultados. Incluso si nos hemos acomodado con esos nuevos hábitos podemos fijarnos otros nuevos.
El otro punto que indiqué que quería hablar hoy está relacionado con mis aprendizajes de este año, creo que al hablar de ellos puedo tocar varios puntos al mismo tiempo.
No esperemos al lunes, ni al año nuevo ni a después de las vacaciones… cuanto antes tomemos decisiones antes veremos resultados. ¡Valora tu tiempo!
Haz que ese deseo de cada fin de año se repita y sea el motor de cada día de tu vida.
Aquí hay una lista de algunos de mis aprendizajes de este año.
Aprendí que Tiempo al tiempo y cada huella irá encontrando su arena.
Aprendí a seguir mi pasión sin miedo, a vencer mi síndrome de impostor y a hacer las cosas que me ilusionan, me dan energía y me hacen sentir en sintonía con mi propósito, sin depender de la aprobación de los demás.
Aprendí, que ser víctima te paraliza, no hay nada más liberador que la sensación de hacerte responsable de todo...... Incluso lo que no depende de ti.
Aprendí a no dejar que nadie me diga que no puedo, que no lo lograré, ni siquiera yo. me CONVERTÍ en lo que creo, porque es lo que SOY.
Aprendí a CREER más en mí misma, a confiar y a esperar el momento adecuado sin perder el tiempo.
Aprendí a AMAR mi presente, tanto lo bueno como lo malo. Me recuerdo cada día que hay muchas cosas que no podemos controlar, pero sí podemos controlar cómo reaccionamos ante ellas.
Aprendí que la respuesta a todo siempre debe ser el AMOR y la COMPASIÓN, incluso hacia uno mismo.
Aprendí que cuesta muy poco hacer sonreír a alguien, y que NUNCA hay que desperdiciar la oportunidad de hacerlo, aunque sea por un instante.
Aprendí que la familia y los amigos, a pesar de la distancia, somos una red de apoyo invaluable y que no debemos tener miedo a ser nosotros mismos con ellos, ni conformarnos con verlos o llamarles en cada cumpleaños o festejos especiales.
Aprendí, que se puede aprender de quien menos te lo esperas si nos quitamos prejuicios, y sobre todo siendo empáticos y conscientes de que todos tienen alguna lucha interna para ser mejores.
Aprendí a que No se puede ser un espectador cómodo, y a la vez crítico, de la historia.
Aprendí que El más fuerte de todos los guerreros son el tiempo y la paciencia.
Aprendí que con la EDAD llega la comprensión y el aprecio de tu activo más importante, tu salud.
Aprendí que antes de hablar debo ESCUCHAR.
Aprendí que está bien fallar o equivocarse y a ser Resiliente.
Aprendí que no hay que tener miedo, vergüenza o sentirse menos por pedir ayuda.
Aprendí que la vida es muy corta como para tomársela en serio.
Aprendí que TODOS podemos ser Instrumentos de Dios para hacer el bien.
Aprendí que Siempre hay un tiempo para marchar, aunque no haya sitio a donde ir.
Aprendí que El tiempo es el juez supremo: quien da y quita razones.
Aprendí que No se recuerdan los días, se recuerdan los momentos.
Aprendí que El tiempo no hace milagros, mi fuerza de voluntad si.
Aprendí que Nunca es demasiado tarde para ser quien quiero ser. No hay límite de tiempo.
Aprendí que Un hoy vale dos mañanas.
Aprendí que Recordar es la única manera de detener el tiempo.
Aprendí que la GRATITUD en silencio no sirve a nadie.
Aprendí que la gratitud no es sólo la mayor de las virtudes. Está emparentada con todas las demás.
Como ves, este año me ha enseñado a valorar las cosas importantes de la vida y aprender a vivir de una manera diferente. Esta experiencia me ayudará a tener una vida mejor.
Estoy agradecida por todo lo que viví y aprendí este último año. Los aprendizajes me fortalecieron y ahora me siento preparada para afrontar los nuevos 365 días que se avecinan.
¿Y tú? Cuéntanos qué aprendiste este año y por qué estás agradecido.
Sabemos que el año viejo puede haber estado lleno de desafíos y adversidades, pero también de oportunidades y momentos especiales.
En resumen, agradecer al año viejo nos brinda una oportunidad invaluable de reflexionar sobre todo lo vivido, aprender de nuestras experiencias y expresar gratitud por cada momento, por cada persona y por cada lección que nos ha acompañado a lo largo del año.
Con este último post del año 2023 los invito a valorar los momentos de felicidad y alegría, dando gracias por las personas que han estado a su lado en momentos difíciles y celebrando los logros alcanzados. Agradecer y reconocer que cada desafío fortalece nuestra resiliencia y nos ayuda a crecer como personas.
Tomarse un momento para agradecer el año viejo nos permite cerrar ciclos, dejar atrás aquello que ya no nos sirve, aquello que no podemos cambiar y dar la bienvenida a nuevas oportunidades y desafíos. Nos ayuda a comenzar el año nuevo con una actitud positiva y llena de esperanza.
Recordemos expresar nuestro agradecimiento a aquellos que nos han apoyado a lo largo del año, a nuestras familias, amigos y colegas. Agradezcamos también a la vida por las enseñanzas recibidas y por cada experiencia que nos ha permitido crecer.
En definitiva, con este articulo, los invito a vivir con gratitud y valorar cada día como una oportunidad para crecer, amar y ser felices. Agradezcamos, celebremos y brindemos por un nuevo año lleno de salud, bendiciones y nuevos desafíos por conquistar para cada uno de nosotros y nuestros seres queridos.
Muy pronto le diremos adiós a este año y estamos muy contentos por los buenos resultados que hemos obtenido y todo gracias a su preferencia. Queremos expresar nuestro agradecimiento por su fidelidad, confianza y apoyo continuo.
Gracias por formar parte de nuestro viaje en 2023. Les deseamos a cada uno de ustedes un nuevo año lleno de bendiciones, oportunidades y éxitos. ¡Hasta pronto!
Comments